
La golondrina de vuelta a su pasado
no encuentra el nido.
«Rincón de Haikus», Mario Benedetti
Mateo miró la botella de Havana Club que llevaba en la bolsa plástica, subió la vista hacia el balcón y gritó: ¡¡¡¡Negroooooo!!!!! Su grito rebotó en el aire para caer como eco sordo sobre sus oídos. Repitió varias veces y nada. A punto de irse una señora asomó la cabeza desde el balcón.
⎯Señora, ¿Leo se encuentra?
⎯Él ya no vive aquí…
⎯¿Pudiera darme su nueva dirección?
⎯No me la sé.
Calle abajo, Mateo se pregunta cómo es posible que el negro se haya mudado del “pañal», como le decían en los buenos tiempos al cuartico de Centro Habana donde nunca faltaron chicas para el negro y el resto del piquete, él incluido, que no es un conquistador en potencia. Cómo pudo irse y dejar tantas madrugadas clavadas como estampillas pornográficas en las paredes, dibujos que ahora quedaron flotando, sin sentido, sobre las cabezas de otros que ignoran las vibraciones de esas paredes. Seguir leyendo «Adiós, Habana»
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